Un corazón confiado

Aunque lo hemos dicho a menudo, no está de más repetirlo: debemos hacer lo posible por simplificar nuestra vida.

A todos viene bien, pero especialmente para quienes se sienten llamados a la interiorización  mediante la oración de Jesús.

Este ir haciendo nuestra vida simple, implica un centrarse en lo necesario, un ir dejando cuanto se pueda lo superfluo, lo que me lleva hacia afuera “en fuga”.

Porque hay maneras de actuar y trabajar e incluso de hacer apostolado activo. Pero aun la labor más caritativa es “una fuga” cuando me salgo del corazón, cuando caigo en una exteriorización, en un olvido de mi mismo y Su presencia.

Recordemos: Nada podemos hacer si El Señor no construye la casa, por eso, hagamos tranquilos, sin prisas. Dios sabe lo que conviene y cuando nos conviene.

Busquemos el hacer centrados, desde el equilibrio que brinda un corazón confiado.

Un saludo para todos invocando el Nombre de Jesucristo.

Texto propio del blog

Extraído de elsantonombre.wordpress.com publicado originalmente el 13/06/12

 Hoy domingo el papa Francisco consagra el mundo al Corazón de María

6 Comments on “Un corazón confiado

  1. Hno.Horacio de Jesús Crucificado. FMV.

    Señor Jesús, confió plenamente en tu amor, en tu misericordia, en tu perdón, y en tu Palabra. No me abandones jamás.

  2. Muy bella reflexión. Vengo de estar en un retiro hermoso en la Abadía Benedictina de Los Toldos, Provincia de Buenos Aires. Los monjes son seres que celebran la vida y nos indican que hemos perdido nuestra capacidad de festejar la vida, de festejar a Dios. La oración de Jesús es un camino hermoso hacia el centro de nuestro ser habitado por la Santísima Trinidad. Si permanecemos anclados en ese Dios que se encarnó en nuestra historia y que está en lo exterior, pero más en lo profundo de nuestro ser, nuestra vida y todo lo que hagamos estará impregnado de su Presencia. Susana Topasso. Buenos Aires, Argentina. http://www.susanatopasso.blogspot.com

  3. Muchas gracias… Es un recordatorio muy oportuno.

  4. Dios los bendiga, sus cartas hacen mucho bien a nuestras almas…

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