La depresión

La depresión es un estado particular del ánimo. Se utiliza el término para agrupar distintas sensaciones tales como tristeza, angustia, falta de vitalidad, desesperanza, ausencia de entusiasmo, visión negativa de si mismo y del futuro, etc.

Es un estado pariente del “sin-sentido”, en el que nada colma y esta carencia contrariamente a lo que pudiera suponerse, no genera el ansia de completitud sino un aumento de la desazón. Esta última palabra -de-sazón- ilustra claramente lo que produce la depresión en el alma: Una falta de sabor, nada tiene condimento y por tanto todo da un poco lo mismo.

Los viejos intereses y proyectos ya no motivan y no aparecen nuevas metas vigorizantes ni las ganas de encontrarlas. Se ha perdido la voluntad y su soporte, el deseo de crecimiento.

Para quién se encuentra en esta situación, la oración de Jesús puede servir de gran ayuda. Uno debe situarse precisamente en la sensación de hastío en que se encuentra sumido por la depresión; uno debe llevar su atención allí mismo, al centro del dolor o de la nada nauseosa de lo gris que atormenta, y desde esa zona interior comenzar la repetición del llamado a la misericordia.

¡Señor Jesucristo, Hijo de Dios, ten misericordia de mí ! ha de repetirse con la conciencia de la sensación que estoy padeciendo. Algo en mí ha dejado de valorar el don de la vida, algo se torció, algo se rindió, he perdido el valor para hacer de la existencia una obra digna, por eso pido misericordia (el acercamiento de Dios al propio corazón).

Apelo a aquél que me ha creado y le pido su asistencia, su ayuda generosa y se la pido desde la nada en la que estoy sumido.

Si se puede mover el cuerpo, caminar haciendo el pedido lo más atentamente posible, sino hay fuerzas para moverse puede hacerse desde la silla o en la misma cama en la que nos encontramos postrados. Se requiere tan solo el acto interior, un movimiento del corazón hacia Dios, una apelación al más Alto.

Ese acto del alma que se abre a la gracia llamando la presencia del Salvador es basta para que todo el panorama cambie. Apenas se sienta la brisa nueva de la esperanza, apenas se advierta un leve cambio del clima en el propio corazón, hay que activarse siguiendo esas discretas mociones, como suaves voces interiores que nos impulsan a acometer nuevas proyectos.

La continuidad en la oración de Jesús y el transcurrir de unos pocos días nos permitirán ya re-ordenar nuestra vida hacia nuevos horizontes despejados y frescos. Quizás descubramos luego de un tiempo más, que aquello que llamábamos depresión no era sino el llamado de Cristo para que volviéramos el rumbo hacia la patria verdadera.

texto propio del blog

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4 Comments on “La depresión

  1. El tema es extenso , en particular me parece interesante no la depresión en sí sino de que forma salimos de ella, si buscamos ayuda con los medios de siempre , los propios o si tales situaciones nos sirven para abrirnos vivencialmente desde nuestro interior a algo mas allá de nosotros. En este punto como en muchos la oración de Jesús adquiere un significado enormes porque literalmente en la depresión ( y mas en la profunda) la persona no tiene ganas de ya inclusive de vivir. Que se encuentren tales momentos con la oración de Jesús con el pedido desauciado,desesperado de que tenga piedad de uno (de mi) es algo que glorifica. Y ni que hablar cuando desde ese lugar interior se ve ayudado ( por Dios) solo queda agradecer , agradecer continuamente mediante la oración de Jesús.

    • Coincido contigo Gonzalo. La depresión es muchas veces el único estado que nos lleva a un replanteo global de nuestra vida y posibilita una transformación profunda. Saludos fraternos en Cristo.

  2. Tal vez nos indique también que hemos llegado al fondo y que por tanto es el momento de tomar impulso hacia arriba, hacia la luz ¿como hemos llegado a caer? el trabajo el esfuerzo, el cansancio, el dolor, alguna enfermedad…, todo indica que somos limitados y caducos aunque nuestra verdad última sea Dios que nos llama a estar con él. Por eso enmedio del dolor puedo y debo abrirme a Dios que me conoce y me ama y sabe lo que me hace falta. La oración continua también aquí, tal y como dice el texto, es la puerta hacia una vida mas plena. La depresión puede a ser así, algo pasajero, y que da lugar a una vida más centrada en Dios.

  3. Como medidor diría que es directamente proporcional al esfuerzo que tenemos que hacer para levantarnos de la cama para iniciar la jornada y al fastidio que nos supone. Decían los griegos que el sueño es el hermano de la muerte.. normal que en estas etapas uno busque evadirse de la vida mediante el mismo

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