Contentos con el don de Dios

«Si uno no recibe los talentos propios de un estado, recibirá los peculiares de otro. Unos estarán en pura fe, otros en otra situación de espíritu. En la misma naturaleza creada, cada criatura tiene lo que conviene a su especie: cada flor tiene su encanto, cada animal su instinto, cada criatura su perfección.

Así, en cada estado diverso de la vida espiritual, cada persona tiene su gracia específica, y cada uno está contento si su buena voluntad sabe acomodarse al estado elegido para él por la providencia. Desde que esta buena voluntad nace en el corazón de un alma, esta se sumerge en la acción divina y ésta obrará más o menos en ella, según esté más o menos abandonada.

Por lo demás, el arte de abandonarse no es otro que el arte de amar. El amor encuentra a Dios en todo, y nada le rehúsa. ¿Cómo rehusarlo? El amor no puede pretender otra cosa que lo que quiere el amor». (*)(**)

Extracto del libro «El abandono en la Divina Providencia» de Jean Pierre Caussade

(*) Texto leído al final del «Momento de La oración de Jesús» del 30/09/21 a las 7 am de Arg. (**) El texto que se lee al final del momento de oración, tiene el propósito de predisponer nuestra actitud para llevar adelante el día. En tal sentido puede tomarse como la ejercitación diaria sugerida.

Cada día (de lunes a viernes) puedes participar a las 22 hs. y 7 Hs de Argentina de La oración de Jesús en este enlace:

https://us02web.zoom.us/j/88619724529

O desde el canal de YouTube en este enlace :

https://www.youtube.com/channel/UCVW3TaEupCwXr8oJOepbQ5A

3 Comments on “Contentos con el don de Dios

  1. Buenas tardes desde España! Cómo llevar a cabo la atención ,continua,el bien hacer,la vida interior…..,en trabajos de producción en cadena,mucho ruido,horarios no fijos,… cómo poder hacerlo? Un abrazo fraterno,les agradecería una orientación, pués a veces no hay opción de elegir trabajo y uno pasa la mayor parte del día en el trabajo.

    • Hola Conchin! Pues menuda tarea debe ser ese trabajo que dices. Mucha fuerza espiritual puedes obtener si puedes ir poco a poco viviendo en silencio aún en esas condiciones. Asociar la oración a determinados movimientos repetitivos puede ayudar mucho. Por ejemplo: Si tienes que ponerle cinta para cerrar una caja y esto te toca hacerlo cientos de veces al día… Cada vez que inicias una caja repites la frase de la oración que has elegido, con la mente. y al terminar el embalaje de nuevo o similar. Otra cosa que puede ser muy útil es hacer paradas mínimas, de 30 segundos o un minuto si fuera posible, como si te secaras la frente y en esos instantes invocar con mucho fervor la asistencia de la gracia para permanecer en un remanso interno pese al tumulto exterior. Y por supuesto, antes de entrar al trabajo, buscar tu centro y pedir con fervor la paz del corazón.

      Suele ocurrir, que cuando hemos llegado a aceptar el trabajo que nos tocó y a vivirlo con calma, la providencia nos envía uno más adecuado a nuestra espiritualidad…

      Un abrazo hermano, Cristo te cuide.

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