Vivir en el presente y en la presencia de Dios son lo mismo

Cuaresma 2023

Prácticas sugeridas:

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Observemos primero como la mente clasifica los momentos en desechables e importantes. Observemos la constante tendencia compulsiva hacia el momento siguiente.

Pongamos una decidida intención en hacer surgir la propia acción, con la actitud adecuada, desde el fondo silencioso y consciente que somos esencialmente. Tomemos nota de lo que ocurra en estos días.

7 Comments on “Vivir en el presente y en la presencia de Dios son lo mismo

  1. Gracias Mario.
    No sabes cómo me ayudan tus indicaciones y comentarios en mi proceso espiritual.

  2. Por estar muy ligado al comentario anterior, el fundamento de la preocupación mencionada más arriba, radica en como uno vive la Fe. Cuando por ejemplo buscamos la Voluntad de Dios, la cual nos llama, finalmente a cosas concretas: una obra, una actividad, un estado de vida, un desarraigo… ese «chip planificador» no es otra cosa que el intento para ponernos en marcha, para cumplir en el aquí y el ahora esa Voluntad discernida con la mano en el corazón. Es más… muchos «momentos presentes» que vivimos, han sido frutos de distintos momentos de planificación realizada en el pasado. Esto da entonces lugar a una pregunta ¿Si la contemplación y la oración contínua pone su acento en experimentar a cada momento el presente, que lugar ocupa la planificación como inspiración de Dios que nos llama ha compromisos concretos en la construcción de su Reino en el «aqui y el ahora»?

    • Ahora leo este comentario, luego de responderte el anterior. Cualquier actividad puede ser fruto de la inspiración; o mejor dicho, podemos ver distintos grados de inspiración. Por ejemplo, surge en ti la inspiración de pedirle perdón a tal persona, quizá lo hagas de una manera un poco turbada o sin expresarte bien, pero el origen de esa acción fue inspirada por la gracia en el corazón. ¿Verdad?

      Del mismo modo, el ponerse a planificar un apostolado o una acción concreta puede ser claro una inspiración, sin duda. Luego puede ser que planifiques también «inspiradamente» es decir de manera lúcida, sencilla, clara y al punto, creativamente incluso y viviendo en el presente este acto de consciente planificación. Y habrá en esto acierto y error como en todo lo que hacemos. Dime si te aclara lo que comentabas. Un abrazo Mario!

      • Fuerte y claro!. No quería «enrrollarme» (como dicen en España) en torno al proceso creativo y de planificación, pues en el mismo por lo general, las ideas, «saltan» a ti en cualquier momento. Puede que uno, ordenadamente, le de un espacio como para «pasar a limpio» ese proceso creativo o planificador, pero la mente te aporta ideas (asociando y comparando ideas que uno suele tener en la memoria o no) mientras estás haciendo otra cosa. Por lo tanto, si le das curso, no vives el momento presente (por ejemplo cocinando, como tu me decías) De alli mi pregunta. Conclusión: buscar el entorno proximo de esa idea o pensamiento que irrumpe. Como dices en fenomenología, rastrear de donde viene y alli darle importancia o , dejarlo pasar como una nube. Bárbaro!. Gracias

  3. Gracias Mario por instalar esta «piedra angular» como práctica sugerida en la cuaresma que estamos viviendo todos. Quiero apuntar como primera intervención la dificultad que tengo de conciliar esta verdadera disciplina ascética de «vivir el momento presente», con una practica en la que fui formado desde muy jóven: la de planificar. No solo soy docente de Planificación, si no que toda mi vida la fui construyendo «in situ» valiéndome de esta capacidad. Estoy en estos momentos en la lucha de que el «chip planificador», no ocupe todos o buena parte de los espacios. Pero mi preocupación es la de «no tirar el bebé con los pañales sucios». Esto es, distinguir cuando este capacidad de previsión, de visualización de situaciones futuras, de lectura de la realidad para una acción inmediata o mediata, es de carácter «inspirado», como vivencia de la Voluntad de Dios, de los automatismos y divagaciones que me terminan haciéndome evadir del momento presente.

    • Hola Mario! Gracias por tu comentario. No hay problema con estarse en el momento presente y la ejecución de una planificación ordenada e impecable. Solo se trata de ordenar la sucesión de actividades que se preveen a futuro, como si ordenaras una habitación poniendo casa cosa en su lugar. Lo que importa es hacer esta tarea de manera consciente y viviendo el momento en el cual estás organizando la agenda. No es diferente a ir poniendo ingredientes en la olla para un apetitoso estofado (bien que sé que te la arreglas bien con la cocina!). La futurización consciente de posibles escenarios no es incompatible con el vivir en el ahora.

      Una cuestión diferente es el divagar en torno al futuro y perderse en ello de manera automática o temerosa etc.

      Un abrazo! Cristo te cuide.

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