16° Clase de Fenomenología

Cuestiones sobre el tema de la atención; el entrenamiento de ella, el sentido de su desarrollo y algunos matices.
Algunos ejercicios para entrenar la atención:

1 – Atender con la máxima concentración posible alternativamente a lo que llega por los distintos sentidos. Por ejemplo: Ahora atiendo a lo que escucho y de todo eso que oigo, atiendo a aquel sonido lejano en particular. Ahora atiendo a lo que veo en una mirada global y distante al caminar… y de todo eso que veo fijo la mirada en aquello en particular distante pero notorio… etc. Esto hacerlo varias veces durante el día.

2 – Detenerse en cualquier momento un minuto o dos y revisar lo que se percibe por cada sentido. ¿Qué estoy oliendo? ¿Qué sabor hay en mi boca? ¿Cómo siento a mi cuerpo? y en mi espalda… ¿siento algo? etc. etc.

3 – Ejercitarme con tenacidad en escuchar al otro con el cual me relaciono en un momento determinado, mientras mantengo distenso al cuerpo. Atender también a su rostro y expresiones, a la géstica… sumergirme en el otro sin forzamiento pero con intención de abrirme a su presencia.

4 – Elegir un pequeño objeto (Una cruz, una piedrecita, un anillo etc.) y llevarlo en una de las manos durante todo el día, de modo que sirva como «llamador de la atención» cada vez que descubro que lo he perdido. Rastrear en la memoria si fuera posible el momento en que se lo olvidó, para que podamos observar el automatismo que generó aquella distracción.

5 – Elegir un vídeo que desarrolle un tema que me resulta interesante y practicar la atención distensa.

6 – Sentarse a ver una película de un estilo y temática que resulte atrapante y mirarla atendiendo a permanecer consciente de ser un sujeto viendo un film.

7 – Sentarse durante un lapso de tiempo pre establecido sin hacer nada. Solo prestando atención a todo lo que ocurrirá en el cuerpo y la mente.

8 – Leer tres páginas de un texto que me interese por su temática pero que no haya leído previamente. Luego intentar poner por escrito lo leído.

9 – Evaluar la propia jornada antes de dormir en función del grado de «despierto/dormido» en el que estuve. Un buen indicador de lo atento que se estuvo es la facilidad o dificultad para traer a la presencia todo lo vivido cronológicamente.

Aquí un texto algo abstracto mencionado en el vídeo (del todo innecesario)

3 Comments on “16° Clase de Fenomenología

  1. Excelente video, lo sentí muy motivador, profundo y práctico.
    Me resulta un tema tan “elevado” y, al mismo tiempo, tan cotidiano, que me plantea estar más cerca de lo divino de lo que a veces imaginamos.
    Gracias

  2. Sin duda que la atención no es fácil mantenerla, como se ve en la algorritmia, sin querer nos vamos y nunca mejor dicho y nos vamos a lo onírico tanto si estamos dormidos como si estamos despiertos. Ejercitar al atención es posible y Seguramente es el mejor deporte, pero también es cierto que atiendo a lo que me gusta, al amigo lo atiendo sin esfuerzo pero al enemigo lo desatiendo o lo atiendo con gran esfuerzo. Pienso que la oración es atención en la medida en que amamos a Dios y esto esto es realmente obra de la gracia. Sin la gracia no puedo dirigir mi atención a Dios. Es Dios el que me permite dirigirme a Dios y en ello encuentro la mejor forma de atención. Considero que sin cierto esfuerzo no es posible la atención pero sin la gracia, que me permite atender a Dios, no es posible la oración.

Responder a Jose AntonioCancelar respuesta