La paz del corazón
“Sin oración espiritual interior, no hay oración en absoluto, pues sólo ella es la oración real, verdaderamente agradable para Dios. Lo que importa es que el alma esté presente en el interior de las palabras de la oración. Sea la oración hecha en casa o en la iglesia, si la oración interior está ausente, las palabras no tienen más que la apariencia, y no la realidad de la oración.
¿Qué es, por consiguiente, la oración? La oración es la elevación del intelecto y del corazón hacia Dios, pro la alabanza y la acción de gracias, por la súplica también, para obtener las cosas buena que necesitamos, ya se trate de cosas espirituales o de cosas materiales.
La esencia de la oración consiste, entonces, en la elevación espiritual de corazón hacia Dios. El intelecto, encerrado en el corazón, permanece totalmente consciente ante la faz de Dios, colmado de adoración, y expande ante él su mor. Esa es la oración espiritual, y toda oración debiera ser de tal naturaleza. La oración exterior se haga en casa o en la iglesia, no es más que la expresión verbal y la forma de la oración; la esencia o el alma de la oración está en el interior del intelecto y del corazón del hombre. Todo el orden de oraciones establecida por la Iglesia, todas las oraciones compuestas para el uso individual, están llenas de un movimiento de amor hacia Dios. Aquél que ora con sólo un poco de atención no puede evitar dirigirse hacia Dios amenos que esté completamente desatento de lo que hace.”
Reblogueó esto en Laus Deo.
Quería comentar que esa entrada con el hermano Víctor Hugo no se puede conectar
Gracias por recordar algo tan elemental y tan importante.
PAZ Y BIEN , asi es, La esencia de la oración consiste, entonces, en la elevación espiritual de corazón hacia Dios. BENDICIONES HNOS
Muchas gracias, que gran reflexión y lección sobre la oración. Bendiciones