Vuelve a casa

Cuaresma 2023

Hacernos habitantes del desierto es al final, acostumbrarse a vivir desde el interior. Cultivar la práctica de ir al corazón cada vez que descubrimos la carencia. La carencia no es algo negativo, es el llamado de nuestra naturaleza original que nos invita a salir del exilio del sin sentido. El hogar verdadero nos reclama, es el Ser que nos llama desde antiguo y desde el fondo del alma.

Sencillamente, cada vez que el vacío se presenta vestido con alguno de sus innumerables ropajes, desechemos el impulso frenético que nos lleva hacia la anestesia, no sigamos el ansia que adormece, sino que permanezcamos atentos y vivos en el ahora que se presenta. Ese momento ingrato o tedioso o complicado es Dios mismo que nos toca el hombro.

Hemos de girar el rostro hacia Él que nos pregunta: ¿A donde vas?, ¿Qué buscas allá que no tengas aquí? ¿Sigues creyendo que en las cosas encontrarás la saciedad? ¿No es ya suficiente el desvarío? Vuelve a casa y vive según te concebí. ¿No te ha enseñado nada el sufrimiento? Tu vida tiene un sentido y una vocación esencial que la encamina. No importa la edad que tienes, acoge ese regalo original.

Entonces con paciente determinación, dejamos de huir. Nos volvemos más calmos, abiertos al presente y nos hacemos familiares con el idioma de Dios en todo lo que ocurre. Respondemos al deber del momento con intención impecable, con la mayor entrega posible, descansando enteramente en la confianza. En el desierto cuaresmal de la vida, la pascua de resurrección no tiene porque estar al final, sino ahora mismo, en el fondo silencioso que permite todo lo demás.

elsantonombre.org

Citas bíblicas recomendadas: Isaías 49, 14 -17 / Cantares 8, 5 – 7 / 1º Juan 4, 18 – 19

Lista con las oraciones del mes de marzo 2023

4 Comments on “Vuelve a casa

  1. Pingback: Vuelve a casa – Germán Flores

  2. Buenas noches.

    Escribo desde la ciudad de Guayaquil, país Estoy en búsqueda permanente por el llamado interno perenne que siempre he tenido. Leyendo el libro «El arte de meditar» del padre Edgar Aguilar , encontré la palabra hesicasmo , la misma que me llevó la palabra Filocalia. Todo nuevo para mi y comenzando a navegar por Google encontré las clases que ustedes dictaron en época de la pandemia en «El santo nombre». Un verdadero bálsamo para mí alma. Me enlacé pero no puedo todavía accesar correctamente a la basta información que ustedes muy gentilmente brindan. Favor indiqueme como acceder a toda la información. Mi nombre es Maria Virginia Ortega Gracias

  3. Pues mi humilde experiencia es que mi salvación ha estado en la repetición del nombre de Jesús lo sientro y lo respiro con la nariz o con la garganta o con el corazón o con el hondon del cuerpo pero lo más fácil es repetirlo con la nariz se acopla muy bien a la respiración y El me lleva a la consagración de todos mis actos a Diós entonces me deja muy tranquila porque las consecuencias de los actos ya son de El… Puede que en las contrariedades, sobre todo físicas, que ocurran en mi familia me conmuevan un poquito pero esa conmoción solo me dura horas
    Me ha gustado mucho entender lo de la hesiquia o el muro que nos protege
    Y carencias teniendo el nombre de Jesús y viviéndolo pues tampoco hay ninguna
    Me ha venido muy bien en esta Cuaresma la no divagación sobre todo en los actos eso que nos recomendabais de estar en ese acto que realizo y no en el siguiente, qué verdad es si nos dejamos llevar
    Pues así os agradezco todo lo que estoy aprendiendo y ya veis que lo mío es muy simple pero no doy para más o me conformo muy muy bien con esto
    Un abrazo para todos en Cristo Jesús

Responder a María José de LaraCancelar respuesta