La paz del corazón
«Lo más importante para nosotros es la oración. Integrar en nuestra vida el hábito de la oración continua es el primer impulso que nos anima a participar de la Fraternidad. Queremos vivir en oración, porque ello nos permite percibir la presencia de Dios en lo cotidiano, en cualquier lugar y circunstancia. La oración puede empezar de forma tibia, casi imperceptible, pero va aumentando su fervor al hacerse frecuente.
Se hace con los labios o con la mente, quietos o en movimiento, en soledad o en compañía porque lo importante es prestarle atención. Una cálida intención del espíritu que anhela a Dios. Cuando la oración es muy habitual la mente deja de resistirse y llega a buscarla cuando se ausenta.
Dependiendo de la gracia, de las circunstancias de cada uno y de la dedicación que pongamos en nuestra práctica personal, en algún momento empieza a descender al corazón. Este bajar se siente como oración encarnada, se hace implícita a todos los momentos y nos cambia el modo de ser y estar, lo cual transforma enteramente la conducta.
Una calma nueva se aposenta en el ánimo y quedamos menos expuestos a los vaivenes mentales y corporales; sentimos lo que ocurre tal vez más que antes, pero no nos saca del centro, de esa ermita o templo interior donde hemos encontrado la paz del corazón. Descubrimos en nosotros una gran capacidad para actuar libres de preocupación. Nos damos cuenta realmente y no como expresión retórica de que estamos en las manos de Dios…»
Fragmento del libro «La huella de tu nombre», pág. 261; Anexo segundo.
Aviso para nuevo momento de oración e invitaciones:
Nuevo espacio de oración íntima y fraternal del Santo Nombre (no por Youtube)
Debajo tres enlaces a retiros o talleres en distintos carismas y modalidades:
Introducción a la contemplación en Colombia (De padre Víctor) (Junio)
Fray Pepe Guirado realizará retiros en Valencia y en Ávila – Haz clic aquí para informarte (Octubre)
No es que el fragmento de La Huella de tu Nombre sea bueno es que es buenísimo de principio a fin es para leer los releerlo integrarlo… es el resumen de todo nuestro caminar muchísimas gracias
Hola María José! «Un resumen de nuestro caminar»; que bueno que lo veas así. Un abrazo y hasta cada oración.