La paz del corazón
¿Cuál sería el sentido hoy en día de iniciar una nueva forma de vida monástica?
Quizás poder canalizar una particular vocación, expresar cierta experiencia interna en un ámbito adecuado, que permita su asimilación y desarrollo.
Hoy en día es observable un buen número de surgimientos vocacionales, de nuevas pequeñas fundaciones, de carismas muy diferentes, en diversas latitudes, en toda la Iglesia.
¿Cómo explicas que mientras en Europa, por ejemplo, se cierra un monasterio por año, se produzcan nuevos emprendimientos de vida consagrada?
Es un fenómeno complejo. Pienso que el monacato en general precisa una renovación, que lo vivifique y lo haga llamativo para las almas, que aún en la época actual, están deseosas de entrega.
Pero creo que esta renovación no se refiere a las formas exteriores o a un ablandamiento que lo haga asimilable a la secularización creciente.
Hace falta un fervor, un abrazar los carismas originales con renovado vigor; a esa renovación del monacato hago referencia.
En general suele entenderse la palabra renovación, como adaptación a lo actual o a la época y hay que ver muy bien en que es necesario adaptarse a la época y en que no hay que adaptarse de ninguna manera.
No hay que adaptarse al relativismo reinante por caso, en donde todo da lo mismo. No hay que adaptarse a valores consumistas o mercantilistas.
Cuando se habla de apertura por citar una palabra muy en boga… ¿A que nos referimos? ¿A dejar de usar hábito? ¿O a abrir el corazón a las necesidades de los que se acercan buscando una palabra de vida eterna?
Dejar de usar hábito no necesariamente es resultado de una apertura, puede ser también un no querer testificar una diferente condición de vida. Un no asumirse ante los demás como diferente, debido a la consagración religiosa. No siempre, pero podría significar eso.
Fundarse en las propias certezas y carismas vocacionales no es quedarse en la antigüedad, sino sostenerse en la propia raíz que fundamenta la fe.
Si, me parece, es necesario esforzarse para traducir a términos actuales verdades de siempre, para que sean comprensibles por una estructura mental y cultural diferente.
¿Por qué muchas nuevas vocaciones no se integran a formas ya existentes? ¿Por qué fundaciones nuevas cuando en ocasiones los carismas son similares a lo que ya se ha fundado?
Es que muchas veces los carismas son similares a lo que fue la orden existente en su origen, no en su realidad presente.
Hay gente con vocación monástica que cuenta experiencias de profunda desilusión al integrarse a un postulantado o noviciado, al encontrarse con algo totalmente ajeno a lo que se imaginó cuando leyó la impronta del fundador o la espiritualidad que se preconizaba en un folleto.
Por otra parte los requisitos que ponen muchas congregaciones no responden a la realidad de quién se siente llamado y en el momento en que se confirma su vocación. Las nuevas expresiones, son una posibilidad muy interesante de dar savia nueva al árbol de la Iglesia.
Quizás repercutan también, vigorizando instituciones ya existentes, que se vean motivadas por este espíritu fervoroso que parece volver a germinar.
Ahora… ¿no se corre un riesgo con estas fundaciones nuevas? ¿No es peligroso, en cierto sentido, que se incurra en el error o en experiencias fallidas?
Por cierto que es necesario que estas nuevas fundaciones y surgimientos vocacionales de la más diversa índole, sean acompañadas espiritualmente por quienes deben encargarse de ello. Seguidas con atención en su evolución. Claro que si, es necesario. Ir viendo como procesan esos emprendimientos.
Un riesgo real es el de asfixiar la nueva vida de oración que quiere nacer, por temor a que la experiencia no resulte. Si la experiencia no resulta, cada quién puede volverse a donde vino, con un aprendizaje efectuado. Con supervisión adecuada, mucho no se puede perder.
Por otra parte, es muy dolorosa la experiencia reciente de la Iglesia en ámbitos que son de dominio público y que no han resultado de ideas nuevas o de vocaciones nuevas, sino todo lo contrario.
A propósito del tema que mencionas, ¿cómo te parece que ha respondido la Iglesia?
Opino que el Santo Padre ha respondido de una manera excelente, con coherencia absoluta. Creo que ha manifestado la humildad necesaria, los esfuerzos de corrección que se están haciendo también, el contacto con las personas afectadas, el reconocimiento de los errores institucionales.
Me ha resultado muy ejemplar la actitud del Papa, que no se ha dejado llevar para ningún extremo. No ha caído en la demagogia, ni en la negación. Ha sido serio, preciso, paciente, un verdadero pastor en épocas de tormentas muy fuertes.
¿Sabes una cosa? Nunca la Iglesia ha atravesado una tormenta como esta, desde el punto de vista de lo intercomunicado que está el mundo. Nunca se la ha desacreditado tanto con razón o sin ella en la historia, debido a la difusión que hoy hacen los medios de comunicación. Sin ni siquiera considerar lo tendencioso de las informaciones.
¿Cómo ves el futuro de la Iglesia en un mundo cada vez mas desacralizado?
Lo veo auspicioso. Creo que la Iglesia se fortalecerá con todo esto, que aprenderá para no repetir errores y que un contacto con su espiritualidad mas profunda está renaciendo.
La nueva evangelización recién está empezando y esta creciendo, comenzando por nuestros propios corazones.
elsantonombre.org
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El texto posteado se redactó uniendo respuestas dadas a preguntas formuladas por mail, a raíz de la publicación de «Hesicasmo católico» días atrás. Algunas preguntas han sido acortadas y editadas para facilitar su lectura.
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Links de hoy:
A lo poco que alcanzo a observar, veo que todo esto nos está llevando a, de manera individual, tomar la iniciativa e «ir hacia adentro» buscar momentos de silencio. Ahí, buscando, nos encontraremos y haremos díálogo con quien «sabemos nos ama» . Bendita sea la Oración del corazón
Todo evoluciona ¡que maravilla los avances tecnicos y más aún los cientificos. LA IGLESIA está en ello, ¿sera la ermita virtual, el camino actual? No lo sé, lo que sí sé es que no depende de la edad, del sexo, de la raza, del C.I. está al alcance de tod@s los hijos de Dios.PREGONEMOS SU PALABRA y cubramonos con el habito del AMOR (en eso reconoceran que sois mis discipulos) ¿que reglas? ¿es que no está claro EL NUEVO TESTAMENTO? te quiere tu hermano………….
«Opiniones» es una entrega muy importante en mi opinion ya que tiene el animo de hablar abiertamente de un problema obvio. Porque fundar nuevas congregaciones con varios «nuevos» aspectos cuales son en su fondo relacionados con las antiguas reglas de los primeros ordenes? Cuales son las caracteristicas de aquellas «novedades» que son de tanta importancia que permiten de fundar algo nuevo. No seria mas modesto y mas humilde de integrarse a los ordenes ya existentes y asi ser reforzando a los ordenes existentes cuando se sienta el llamado de vivir una vida religiosa?
No hay el peligro de un individualismo exagerado aun un narcisimo en aquellas fundaciones nuevos?
De otro lado tambien a mi me parece de ser un señal de una vitaliad nueva de la iglesia global que se forman nuevos grupos pequeños que intentan de vivir segun el mandamiento de Cristo de ser «el sal de la tierra». Llevar habito o no es un problema secundario.