La paz del corazón
Meditación V
Si una ocupación honesta y necesaria nos impide practicar los ejercicios acostumbrados de nuestra vida austera, no sucumbamos, por el amor desmedido a nuestras observancias, a la tristeza, a la cólera o a la indignación porque, precisamente para contrarrestar esos vicios, hacíamos nosotros todo eso que nos vemos ahora obligados a omitir.
No es tanto lo que se gana por la práctica de un ayuno como lo que se pierde por un momento de cólera; y el fruto que sacamos de la lectura, no iguala al daño que nos causamos por el menosprecio de un hermano.
de «Colaciones» de Casiano
La verdad es que me he sentido reflejado, y no para mi satisfacción, sino todo lo contrario, pido perdon por todas mis faltas para mis hermanos. Un abrazo en Xto Amo y Señor nuestro
Cualquier tarea si la hacemos con generosidad , humildad , con la maxima entrega de que en ese momento somos capaces y con Caridad , se transforma en profunda oración y como El nos Ama tal cual somos Elige nuestro corazón como Su Morada y Ora por nosotros . Solo nos pide sinceridad .
El texto me ha llevado a pensar en la parábola del fariseo y el publicano.
Siempre que leo a Casiano, me siento transportado a aquellos desiertos, en esos tiempos antiguos y recorreindo las celdas y problemáticas de tantos hermanos, que al igual que nosotros buscaban la intimidad con El que Es.
La practicidad y sensatez de los consejos que transmite es excelente. Este último donde nos recuerda que la austeridad es para suprimir los vicios y que no por mantenerla caigamos nuevamente en ellos, es de los que mas me agradan.
Igualmente, su definición de la pureza de corazón como el objetivo de la vida monástica ha marcado a generaciones de monjes y espero nos guíe también a todos.
Un saludo en Cristo!
Ante tantas preocupaciones cotidianas resulta difícil acallar la mente y apaciguar el corazón. He descubierto que, cuando no se logra la paz necesaria para orar, es bueno estar atento e invocar al Señor a cualquier hora, en medio del quehacer y no claudicar en esa constante lucha por no perder nuestra paz, interior y exterior. La paz del corazón es el corazón de la paz.
Me ha costado mucho dejar a un lado mis esquemas y forma de pensar al tener que posponer a veces momentos de intimidad con el Señor para atender a mi familia, pero al invocar el Santo nombre he aprendido a ver la necesidad de ellos antes que la mia. Dios los bendiga.
PAX. En algún libro de un P. Jesuita lei esta frase «lo sagrado retrasa lo sagrado» y me dio mucha paz leerlo pues aveces por mas que queramos encontrar ese momento de intimidad y silencio no nos es posible. Es decir, por andar activos no podemos ser contemplativos, pero el Señor se encarga de hacer de nuestros actos sencillos, sinceros y con Amor, una oblacion agradable a Él (que probablemente pudieran tener «más valor» que dos horas de silencio … Deus Benedicite!!
He vivido momentos de escrúpulos, de ansiedad y tristeza cuando me sentía impedida de orar, de hacer la lectura espiritual aunque me ocupaba de cosas que eran necesarias para la casa, para los otros. Me ha ayudado descubrir que se mi horizonte es Cristo y mi encuentro con Él, el Señor de mí vida, ese horizonte se mantiene aunque no pueda seguir lo que tengo programado. El programa es bueno, la fidelidad es necesaria todavía aceptar el inesperado que irrumpe en nuestra vida nos ayuda a hacer la descubierta que el esencial es más que os programas, que los ejercicios de piedad, que nuestras observancias.
PADRE SANTO, EN TU HIJO JESUS, CAPACITANOS PARA QUE CON EL ESPIRITU SANTO EL PRINCIPAL FRUTO DE NUESTRA INTIMIDAD CONTIGO SEA EL AMOR.