La paz del corazón
«Considera cómo crecen los lirios del campo, no trabajan ni hilan… Los justos crecen de virtud en virtud, justamente porque no trabajan ni hilan: no trabajan en los hornos de ladrillos de Egipto, o sea, en los placeres de la carne; ni hilan, o sea, no se embanderan en preocupaciones por las cosas temporales.
¿Quieres crecer? Entonces no trabajes en ti mismo (para tu egoísmo), ni hiles cosas mundanas, y así serás pobre….
El justo crece en la tierra de su pobreza (Gen 41,52), o sea, en la humildad del corazón. Cuando decrece en sí mismo, entonces Dios crece en él.
… Cuando tu te humillas, entonces Dios se exalta en ti, porque te levantará sobre todo lo que es vanidad y aflicción de espíritu (Ecle 1,14)».
«Escritos selectos» de San Antonio de Padua – Editorial Apostolado Mariano
¡ Señor Jesús,hijo de Dios ¡¡¡ muéstrame tu piedad y tu amor, permitiendo que mis límites para caer en pecado se estrechen cada día más…te doy gracias por tu misericordia y tu amor sin condiciones…tráeme la gracia y no dejes que caiga en tentación,Amén
¡Jesucristo,hijo de Dios,ten piedad de mí,pecador !!!
San Carlos Foucolt
¡Ten Piedad, Jesucristo Mesías, ten Piedad!
Tan solo Señor, aumenta mi fe, ¡Ten Piedad, Jesucristo Mesías, ten Piedad!
Se crece para vida eterna cuando dejamos que la cruz nos ponga de presente ,que no somos dios,que es necesario morir al amor de sí, porque está escrito,»Hay un Dios y no hay otro».Wilson Rodríguez.
Últimamente, las preocupaciones mundanas me han robado el sueño y la paz. Tomo nota.