La paz del corazón
La oración fluye, viene y se va, se concentra o se diluye según vive en la intención.
aquel lugar en el que todo se comprende, en el que los opuestos se ven conciliados y en donde la Presencia de Dios pareciera hacerse claramente perceptual”…
Es importante empezar a simplificar todo. Diferenciar necesidad de deseo. Hacer más despacio. No comprometernos con muchas cosas…
En la mente la oración de Jesús. En la emoción el suave contento de vivir entregado a la providencia. En la acción el cumplimiento impecable del deber que toca.