Etiqueta: La oración ininterrumpida

Permanecer en el nombre

Que el monje coma, beba, se sienta, sirva, camine, cualquier cosa que haga, debe decir continuamente: Señor Jesucristo, Hijo de Dios, ten compasión de mí… que el nombre del Señor Jesús descendido al abismo del corazón derribe al dragón que domina los pastos internos, que salve el alma y le devuelva la vida…

Algunas respuestas V

No llegan a distraernos verdaderamente, ya que al estar entregados a la voluntad divina, se nos quita la preocupación, que es lo que realmente nos distrae.

Algunas respuestas

el requisito principal es que el Nombre de Jesús sea parte de la jaculatoria

El incienso de nuestros actos amorosos

De intercambios por mail con el Padre espiritual «‒ Y pasa que en cierto sentido, somos importantes, porque somos hijos de Dios, llamados a la divinización. El ser humano es una hermosa creación, con un destino sublime de participación en la vida celestial. Y… Continue Reading «El incienso de nuestros actos amorosos»